Para todos queda claro que parte de las promesas de campaña de la gobernadora Delfina Gómez, está la de que en el Estado de México no habría nuevos impuestos, siguiendo la línea del discurso presidencial respecto a este tema.
Error. El ejemplo de seguir al gobierno Federal, en la propuesta de paquete fiscal 2024 para la entidad, el Poder Ejecutivo solicitó al Legislativo la creación de tres nuevos impuestos “ambientales” que podrían impactar en la sociedad de manera indirecta:
Un impuesto será para disposición, confinamiento y almacenamiento de basura que se cobrará a quienes realicen esta actividad en sitios de disposición final, es decir, a los recolectores privados que ayudan a recoger los residuos donde los camiones municipales no llegan lo que puede implicar un cobro a las personas que usan este servicio.
El segundo impuesto será a la extracción de materiales pétreos, lo que derivará en aumento en los materiales de construcción.
El tercer impuesto será a contaminantes del agua a quien realice actividades que desechen o descarguen sustancias contaminantes al agua. No se detalla en qué volumen por lo que podrían ser objeto de este impuesto, desde gasolineras hasta oficinas que arrojen agua de limpieza de oficinas por el drenaje.
