noviembre 22, 2024

El problema más difícil en el país

Compartir

Por Luis Sunderland

El acontecer nacional, tiene una dinámica tan cargada de intensidad y de temas, que es muy difícil para la ciudadanía en general, hacer una selección sobre cuál es el problema mayor que nos aqueja a los mexicanos.

Casi Todos sabemos que el país está en problemas y de diferente índole. Esto se debe  creo yo, a la naturaleza tan plural y diversa que compone a la sociedad nacional. Entre la inseguridad, la falta de medicamentos, la violencia desatada, el narcotráfico, el cobro de piso, la terrible corrupción y la impunidad, la gente se siente en un país que reina la esquizofrenia.

No es difícil escuchar puntos de vista que señalan que hay muchos México(s) y esto es porque en nuestro país hay de todo tipo de gente. La diversidad es muy grande, así como los intereses de cada quien. De los estratos sociales que compone la sociedad, está la clase alta, que pareciera tiene resuelto su problema económico y que difícilmente se detiene a pensar en aquellos que componen a la clase media y a las clases populares.

Y están quienes componen la clase popular. Ellos que literalmente se parten el lomo para poder comer y llevar alimentación a sus casas para su familia. Ellos que siempre han estado en la duda de cómo subsistir, y que difícilmente pueden pensar en otra cosa más que recorrer a veces seis horas de transporte público para llegar a sus centros de trabajo, cuando tienen la fortuna de estar empleados.

Falta mencionar a alguien vital e importante: la gente del campo, las que no viven en las áreas urbanas, pero que también ahí hay diferencias y muy importantes. Porque no es lo mismo vivir en una localidad de tres mil personas que en una de 10,mil o más habitantes o de plano vivir en la cerranía en un caserío con no más de 50 vecinos.

México es un verdadero crisol de estratos sociales que nos impiden ver a todos y tomar conciencia del papel que juegan cada uno en el país, en su economía, en su composición social con todas sus limitaciones o alcances que se puedan llegar a tener.

Tal panorama nos hace razonar que si hiciéramos una magna encuesta entre todos los mexicanos -cosa enormemente difícil- y preguntáramos a cada uno ¿cuál es a su juicio el mayor problema al que se enfrenta México? las respuestas serían extremadamente dispares.

En mi opinión de ciudadano mexicano, tengo la certeza de que mi respuesta sería que nuestro principal y mayor reto nacional es el de la identificación personal y comunitaria de cada uno de los mexicanos. El lugar que ocupo en el país. Me explico: el más grande reto que tenemos es el de la polarización, el de la falta de unión, el que cada quien piensa “que se haga la voluntad de Dios, pero en las mulas de mi compadre”.

Creo que el mayor pecado por decirlo de alguna manera, del gobierno federal es precisamente el haber coadyuvado a que esta polarización se haya acentuado de tal manera que ahora se antoja casi una tarea imposible de lograr la reconciliación entre todos.

Además, está la manera en que los de arriba enfatizan que en este país hay dos clases de habitantes, los que están a favor del gobierno, y los que no. A estos últimos se les señala como enemigos de todos y como gente insensible que no le importa lo que pase a los otros, y eso no ayuda a que la gente tome iniciativa en las ocasiones en las que se podría abonar para lograr una distención entre las diferencias, porque en el ambiente se respira a veces como un principio de odio entre los que muy torpemente han llamado fifís y chairos.

Menuda tarea tendrá que emprender el próximo presidente que inicie en el 2024: reconciliar a todos y hacernos sentir que el primer mandatario es de todos los mexicanos. Romper completamente con esa falsa premisa de que en México, hay diferentes mexicanos y convencer a todos que si no nos unimos en torno a la reconciliación, al orgullo de nuestras raíces y al bienestar de todos, por separado y en conjunto, México corre el peligro de una lucha intestina que solo nos traería vivir escenarios que ni nos imaginamos vivir en este siglo XXI.

Este sentimiento de unión, debe nacer en cada uno de los mexicanos desde el interior del alma, del corazón y de nuestras entrañas. Creo que sí lo podríamos logra. Ejemplos hay muchos.

Iniciemos con dejar de hablar mal de los que no piensan como nosotros y dejemos que se expresen, porque todos tienen motivo para sentirse mal en torno a lo que está pasando en México.

Todos somos mexicanos y ahí está el motivo más importante que nos une, busquemos lo que nos hace sentir amor por nuestro suelo patrio y se verá que es más grande lo que nos hermana que los que nos divide.

About The Author

Related posts

1 Comment

Deja un comentario