
Por falta de pagos exhiben omisiones de Guadalupe Guerrero
Además, deja sin bonos a personal en hospitales
Representantes de IMSS-Bienestar, ISEM, el SNTSA y la Secretaría de Gobernación acordaron desde marzo de este año en una reunión celebrada en la CDMx, que los bonos de salud y de canasta básica del personal médico del Edomex serían pagados en la segunda quincena de junio con presupuesto propio de cada institución: el ISEM los entregaría en papel, mientras que IMSS-Bienestar los cubriría en efectivo.
A pesar de que el ISEM ya cumplió con su parte, IMSS-Bienestar sigue sin pagar a su personal. Esta omisión ha desatado una ola de inconformidad entre los trabajadores, que acusan directamente a la titular en el Estado de México, Guadalupe Guerrero Avendaño, de falta de capacidad, gestión y sensibilidad frente a la crisis laboral que ella misma ha provocado.
La administración de Guerrero Avendaño ha quedado severamente cuestionada por una cadena de negligencias médicas, omisiones administrativas y ahora, por no garantizar el pago de prestaciones básicas a personal transferido al IMSS-Bienestar. La falta de respuesta ha generado movilizaciones en centros de salud y hospitales, donde el personal sanitario advierte que está en riesgo no solo la estabilidad del sistema, sino también la vida de cientos de pacientes.

Este día, trabajadores del sector salud se manifestaron con cartulinas y lonas en las unidades médicas a su cargo. Las consignas fueron claras:
“Ya no más faltas de respeto a la base trabajadora; esta vez no vamos a parar hasta que se cumplan los acuerdos”
“Apoyo total a los compañeros que no han recibido el bono salud ni el bono de canasta básica, así como los pagos pendientes de prestaciones laborales”
“Exigimos pagos de estímulos mensuales, insumos y bonos económicos”; “Trabajamos bajo protesta: IMSS-Bienestar es un fracaso”
Mientras el SNTSA intenta capitalizar el malestar, la realidad es que la responsabilidad del pago ya no recae en el ISEM ni en el gobierno del Estado. Como quedó establecido en el convenio interinstitucional, es IMSS-Bienestar quien debe cubrir estas obligaciones con recursos federales.
El ISEM, además, ha reiterado que no tiene competencia legal ni presupuestal para transferir dinero a IMSS-Bienestar, y que ya cumplió conforme a lo estipulado en la minuta.

El problema de fondo es la falta de gestión de Guadalupe Guerrero, quien, lejos de asumir su papel, ha evadido el conflicto con los trabajadores y no ha realizado los trámites correspondientes ante las oficinas centrales para asegurar los pagos. Médicos y enfermeras afirman que la coordinadora estatal se ha vuelto inoperante y omisa ante la gravedad del problema.
Según el Anexo 4 del Convenio de Coordinación entre el ISEM y el IMSS-Bienestar, se establecieron criterios claros para la conciliación de prestaciones al personal transferido. En él se especifica que la entrega de bonos corresponde exclusivamente al esquema operativo y financiero del IMSS-Bienestar. Pese a ello, la coordinadora estatal no ha exigido su cumplimiento ni ha defendido los derechos de los trabajadores ante la federación.
Todo indica que las protestas continuarán hasta que los pagos se liberen. El personal médico advierte que Guadalupe Guerrero está al borde de generar una de las crisis más graves en el sistema de salud del Estado de México, por su intransigencia, omisiones y falta de liderazgo.