Luis Sunderland Méndez @LouSunderland
De nueva cuenta López Obrador abusa de su posición y ordena a sus huestes en el Congreso que en venganza contra los ministros de la Corte, le arrebaten al Poder Judicial $15mil 434 millones de pesos de 13 fideicomisos que, según él, solo contribuyen a mantener una gestión llena de privilegios de los Ministros. Pero se equivoca como siempre, porque queriendo afectar a unos, su alevosa agresión solo afectará a más de 50 mil trabajadores del Poder Judicial en sus derechos laborales y no como dice él en su pretendido de crear un poder Judicial independiente, imparcial, austero y sin privilegios.
Al menos 6 de esos fideicomisos están relacionados con obligaciones patronales, su cumplimiento constituye derechos de las y los trabajadores en materia laboral, seguridad social, pensión, vivienda, cobertura de salud y retiro.
Todos estos están reconocidos no solo en la Ley Federal del Trabajo, sino en la propia Constitución. Estos recursos no constituyen prestaciones adicionales, sino derechos adquiridos de las personas que laboran en el Poder Judicial de la Federación cuyo personal operativo representa más del 60% de la plantilla total. Con esta acción sin precedentes, se afecta la operatividad del PJF y el derecho al acceso a la justicia de la sociedad mexicana.
Otros de los fideicomisos afectados están instalados en materia de seguridad social para las y los trabajadores y otros que atienden necesidades específicas de operación como el de Desarrollo de infraestructura que implementará las Reformas Constitucionales en Materia de Justicia Federal y la suscripción de tratados internacionales, como por ejemplo el T-MEC. También hay otros que se destinan a proyectos de infraestructura, en otras palabras, a los espacios donde se imparte la justicia.
La administración de estos fideicomisos es completamente transparente y cuenta con rendición de cuentas. Es pública y consultable por cualquier persona que le interese conocer cómo se manejan esos recursos. Lo importante es destacar que ninguno tiene como destino el pago de prestaciones para los ministros de la Corte. El que está relacionado con pagos a casas habitación es para apoyar al personal cuando hay un cambio de adscripción en cumplimiento de sus requerimientos o de su seguridad personal o labor.
Jorge Romero coordinador del PAN en la Cámara de Diputados, señaló que defenderán los derechos de los trabajadores del PJF, judicializando de manera incuestionable la equivocada votación que hicieron los legisladores afines al gobierno, ya que otra vez exhibieron su enorme torpeza cuando fue la Comisión de Justicia y no la Comisión de Hacienda la que turnó al pleno para la votación. Así que no sería nada raro que en San Lázaro, tengan que reponer el procedimiento, o bien por ahí la Corte iniciara el echarla para atrás.
Esta barbaridad violenta los derechos laborales de personas que pueden llevar 30 o 40 años de servicio y ninguno de ellos es ministro. Hay un caso en particular que mencionó Irene Levy en su columna que la tituló: El fideicomiso se llama Carla y menciona el caso de una joven de ese nombre que es historiadora y que desde hace 24 años trabaja para el PJF. Ella forma parte del personal operativo y se encarga del archivo histórico de la Casa de la Cultura Jurídica en Guadalajara. Ella dio a luz hace 15 años a unas gemelas en el hospital Valentín Gómez Farías en el ISSSTE en Zapopan.
Lamentablemente sus hijas eran prematuras y una de ellas falleció unos días después de nacer y la que logró sobrevivir que pesó 680 gramos, tuvo el infortunio de padecer parálisis cerebral, cuadriparesía espástica, epilepsia entre otras cosas. El salario de Carla es de 17 mil pesos mensuales y ella es la única que tiene ingreso en su hogar, ya que su esposo tiene que permanecer en casa al cuidado permanente de su hija.
La chica requiere de muchísimos medicamentos y de terapias, es atendida en la clínica del ISSSTE, que como están las cosas con los medicamentos, generalmente no los tienen y ella tiene que cubrir con su trabajo el costo que asciende a 2 mil pesos mensuales.
Ella dice que gracias al fideicomiso, el matrimonio puede solventar los gastos en medicamentos, doctores, pañales, silla de ruedas o los anticonvulsivos que el ISSSTE no les da.
Queridos lectores, a López Obrador no le importa nada absolutamente ese tipo de casos, ya nos lo demostró con las medicinas que pudieron salvar la vida de los niños que murieron por la falta de medicamentos contra el cáncer. Esta es otra más de las agresiones que el presidente comete contra la sociedad mexicana. No se puede explicar que aún haya millones de mexicanos que aplaudan su gestión y no vean la realidad que se nos viene encima con una presidencia insensible que maneje los tres poderes de la unión, o sea, una dictadura fortalecida y apoyada con las fuerzas armadas y el crimen organizado.