Luis Sunderland Méndez
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X@LouSunderland
22 de noviembre de 2024
Una gran cantidad de mexicanos apoya a la 4T, quienes no parecen entender, ni les importa hacerlo, que dentro de muy poco tiempo todos estaremos a merced de la voluntad, en primera instancia, de Sheinbaum -aunque ya sabemos quién manda aquí-, por lo que estamos completamente desprotegidos.
Vivir en una sociedad que está polarizada, donde unos casi odian a los otros, nos hace ver que vamos por el camino contrario hacia la reconciliación y unidad nacionales. Es patético ver que solo cuando juega la selección de futbol, y gana, los mexicanos nos podemos identificar entre nosotros.
La sociedad mexicana quedó atrapada en rencores y antagonismos desde el periodo electoral, cuando el que el resultado fue producto de una ilegalidad revestida de fraude y engaño por parte de las autoridades federales que obligaron a los organismos electorales a la sobrerrepresentación que borró a la oposición.
Después vino la venganza contra el Poder Judicial y los organismos autónomos, que solo cimentarán el autoritarismo de Sheinbaum.
A pesar de todo esto y de muchas otras terribles verdades que vivimos, sobre todo por el alto índice de criminalidad y muerte, México solo es uno de los países en los que la sociedad vive con angustia y miedo. En casi todo el orbe esta situación se ha generalizado, al grado de ver que las sociedades están extraviadas y atrapadas dentro de una confrontación entre los sistemas que pretenden gobernar y llevar a todos hacia una nueva manera de vivir acorde con sus intereses.
La pérdida de valores de una buena parte de la población mundial es evidente, ahora solo impera el interés individual, el odio, el resentimiento e incluso vemos que, dentro de las más importantes instituciones y organismos a nivel global, hay una división que las debilita y que pareciera que se ponen del lado de los que no deben de hacerlo.
La humanidad, junto con parte de las religiones entre ellas la católica, y muchos líderes de diferentes países del mundo, están atrapada en la amenaza que significa el Foro Económico Mundial que impulsa la agenda 2030 avalada por la ONU.
Este conglomerado de instituciones y organizaciones pretende imponer en el mundo el nuevo orden mundial, un control global, un solo gobierno, un solo poder, una sola religión, una sola moneda. La expresión “nuevo orden mundial” busca un nuevo período de la historia, hacer cambios en las ideologías políticas y en el equilibrio de poderes.
Trascendió que en el pasado Sínodo celebrado en el Vaticano, una corriente muy grande de importantes prelados católicos trató de abrir la puerta a la apostasía.
La Sinodalidad quiso ser usada para inducir a los obispos a que acepten una agenda más progresista, a realizar una modificación en la forma institucional de gobierno en el Vaticano con lo cual se realizarían modificaciones a la propia moralidad de la Iglesia.
Esta corriente reformadora es apoyada por algunos medios de comunicación seculares, con tendencia hacia la apostasía, con la finalidad de que los católicos acepten estos nuevos criterios y abran los brazos y reciban al apóstata, poniéndolo como ejemplo de progreso e iluminación.
El triunfo de Donald Trump, que trae como bandera el lema de Hacer a América Grande Otra Vez, lo veo más positivo que el de su oponente, que está alineada a intereses obscuros. Siempre es mejor lidiar con alguien que habla claro incluidas sus amenazas, a alguien que oculte sus verdaderas intenciones.
La supremacía blanca reagrupada en torno a Trump, borró a los republicanos tradicionales y los echaron para afuera. Los que se apoderaron del partido, están en contra de la ideología WOKE que son de izquierda liberal, que van por la equidad racial y social, el feminismo, el movimiento LGBT+, el género neutro, la hipersexualización de los niños, el activismo ecológico y el derecho al aborto,
entre otras cosas.
Los actuales republicanos traen otra idea de cómo debe ser la sociedad, inspirados en el Evangelio. Por eso Trump escogió a DJ Vance, que es el católico radical más protestante que se pueda uno encontrar.