Psic. Luis Jaime Sunderland López
Es una hormona crucial en nuestro organismo que desempeña un papel fundamental en la respuesta al estrés. Producida por las glándulas suprarrenales, esta hormona tiene efectos significativos en el funcionamiento del cerebro y todo nuestro cuerpo. A continuación, exploraremos la función del cortisol como hormona del estrés y su impacto en nuestra salud mental y física.
El cortisol tiene muchas funciones en el cuerpo humano, como mediar la respuesta al estrés, regular el metabolismo, la respuesta inflamatoria y la función inmune. En la respuesta al estrés, el cuerpo humano está continuamente respondiendo a estímulos internos y externos. Un factor clave es el sistema nervioso autónomo del cuerpo, que se divide en el sistema nervioso simpático (SNS) y el sistema nervioso parasimpático (SNP).
Cuando los niveles de cortisol se mantienen elevados durante períodos prolongados, pueden surgir efectos perjudiciales. Así, el estrés crónico y la exposición continua al cortisol pueden tener impactos negativos en la salud mental, como el desarrollo de trastornos de ansiedad y depresión, así como en el funcionamiento cognitivo, la memoria y el sistema cardiovascular. Inclusive, hasta se ha comenzado a estudiar la relación que podría tener el estrés crónico y el Alzhéimer.
Es importante mencionar que la actividad física puede ayudar a reducir los niveles de cortisol en el organismo. Por ejemplo, ejercicios aeróbicos moderados a intensos, como correr, nadar, andar en bicicleta y pescar son beneficiosos en este sentido. Además, el yoga, el tai chi y la meditación también pueden ser positivos.
Sabemos que el estrés, en principio, es una respuesta adaptativa, aunque puede volverse disfuncional. Sin embargo, los seres humanos tenemos la capacidad de modificar lo que se percibe como estresante y cómo responder a ello.
Como conclusión, El cortisol, una hormona clave en la respuesta al estrés, desempeña un papel importante en la modulación de la inflamación, regulación del metabolismo y consolidación de memorias emocionales. Sin embargo, cuando la respuesta al estrés se vuelve crónica, puede conducir a una serie de problemas de salud, incluido el aumento del riesgo de enfermedades crónicas, trastornos del estado de ánimo y del sueño, entre otros. Por todo lo anterior, es fundamental reconocer la interrelación entre el estrés y el cortisol, y abordarlo de manera integral.
La psicoterapia puede actuar estimulando la producción una serie de sustancias inhibitorias del estrés, también es capaz de disminuir los efectos del cortisol, lo que llevaría a la reducción de la ansiedad contribuyendo a la resiliencia del individuo.
Psicólogo Luis Jaime Sunderland