Senadoras, senadores y especialistas reconocieron la importancia de la hidrogeología, pues a través de estos conocimientos se pueden proponer mejores acciones públicas para restaurar la calidad y cantidad del agua en las cuencas, así como combatir la escasez y la sequía en algunas regiones del país.
Durante la presentación del libro “Agua. El oro invisible”, la senadora Eva Eugenia Galaz Caletti detalló que más de la mitad del territorio nacional se encuentra en situación de estrés hídrico, es decir, la demanda del líquido supera el 80 por ciento de la disponibilidad natural.
Señaló que a pesar de que el acceso al agua y al saneamiento son derechos humanos y están consagrados en nuestra Constitución, la gestión no es suficiente ni adecuada en nuestro país, pues la infraestructura presenta rezagos en algunos estados, lo cual se debe a malas políticas públicas.
Recordó que, durante los primeros meses de este año, la sequía se agudizó en la zona norte del país, por lo que algunas regiones enfrentan una severa escasez de agua. “Cada vez son más las localidades a las que se les raciona el líquido vital, lo cual genera problemas sanitarios y conflictos sociales”.
Para paliar esta crisis, aseveró la senadora de Morena, textos como el que se presentan son importantes, ya que ayudarán a impulsar la tarea legislativa, así como a enfrentar esta emergencia. “Solucionemos hoy este problema para no heredarlo a nuestros hijos y nietos”, conminó.
Uno de los autores del libro, José Joel Carrillo Rivera, destacó la importancia de la hidrogeología, ya que si no se conoce cómo funcionan los flujos de agua subterránea, no será productivo su aprovechamiento. Por ello denunció la falta de preparación de profesionales en la materia.
Gonzalo Hatch Kuri, coautor del texto, señaló que hay un problema con la educación, ya que no se puede concientizar a la ciudadanía y a los tomadores de decisiones si no existe conocimiento previo alguno sobre este asunto, pues es escasa la formación académica y profesional sobre el ciclo hidrológico y el agua subterránea.
Finalmente, Samuel Schmidt indicó que el gran problema del agua es que en México hay escasez, un mal manejo y está sucia. Además, dijo que hay una incongruencia con el manejo del recurso, pues se ha privatizado al mismo tiempo que está consagrado en la Constitución como un derecho humano.